jueves, 25 de octubre de 2007

Ni una copa más cachorro...

Jajaja, ay mi perro con su hueva tan hermosa, su expresión de borracho, el custodio de los cartones de mi padre, mi cancerbero cervezero, tan rechulo de precioso que vive como yo, hablando como ebrio sin llevar copa encima, hace auualualualuauauuuuu cuando bosteza, me da risa y empiezo a jugar luchitas con él, ah, mi perro es la neta, le da un chingo de miedo cuando hay truenos, entra corriendo a la casa hasta mi cuarto y tengo que sacarlo cargando, cambia tanto de pelo que podría fabricarme un perro nuevo, se mea en las flores de mi abuela y las marchita, hace lo que la guerra a los pobres condimentos, y mi patio, más bien, su patio... es un terreno de sueños.
En fin, hoy ando amargo, me alimento de su desprecio y ¿qué le hago?, pues nada, tratar de mantener la calma y aguantar su actitud de diva, me trata como apestado y juro que de lunes a viernes me baño diario, pero en fin, así es ella, o al menos así lo supongo, que estar tan feo no es mi culpa, que ella se sienta inalcanzable, bueno, pues muy su problema, sí, hoy me alimento de su desprecio, que así se juega y juro que yo no insisto, en mi alma no ha nacido un acosador, en mis ojos no ha renacido el perro suplicante, pero a este corazón, le duele, se amarga otro poco, la esperanza ya no juega a los dados, el mar en tonos cálidos se ha convertido en accidente químico, y como siempre, puede y lo más probable sea que me lo merezco.
Del suelo no paso, montaña rusa cayendo de espalda, colapso inmediato, reconstrucción en proceso... quisiera muchas, muchas copas, las risas y la buena compañía... pero me conformo con ponerme a jugar 2 moons con mis brodas.

No hay comentarios: